La Plaza de la Discordia

Borraron los murales

Derechos Humanos 25 de febrero de 2021 Diario Sumario

(Sumario Noticias, Alta Gracia) La Plaza Mitre es un espacio de disputa simbólica desde hace mucho tiempo. En 2008, el concejal Fabio Iznardo presentó un proyecto para que las gradas de ese espacio sean designadas "Anfiteatro de la Memoria" en homenaje a Alicia y Carlos D´Ambra y Hugo Pavón, desaparecidos de la ciudad de Alta Gracia. También existió un proyecto para que la plaza tuviera un nombre en honor a las víctimas del Terrorismo de Estado. El Centro Vecinal de Barrio Sur manifestó su oposición en ese momento. Una década después, el Concejo Deliberante protagonizó una acalorada discusión por el emplazamiento de un busto de Eduardo Luppi en el mismo lugar.

Desde fines de 2020, la Municipalidad de Alta Gracia está realizando obras de puesta en valor de la Plaza Mitre. En ese contexto, se colocaron adoquines, levantando el viejo piso, hicieron trabajos de poda y se pintaron las gradas. Esta última acción despertó el repudio del Colectivo Paravachasca por la Memoria, a causa de que se borraron los murales en homenaje a Emilia y Santiago D´Ambra.

A continuación, el Comunicado completo:

El Colectivo Paravachasca por la Memoria, expresa su más profundo repudio por la vulneración perpetrada por la Municipalidad de Alta Gracia contra los murales que con mucho esfuerzo plasmaron artistas de esta ciudad en conjunto con este Colectivo de Memoria hace algunos años. 

Estas intervenciones artísticas, que ya eran parte del Patrimonio Cultural de la ciudad, representaban marcas de memoria, que daban cuenta precisamente del lento proceso de recuperación de la memoria local sobre nuestro pasado reciente.

Cabe recordar que en 2012 un grupo de integrantes de este Colectivo fue detenido por "vandalismo" por haber plasmado pequeñas imágenes en la Plaza Manuel Solares.  ¿Cómo debería tipificarse entonces este atropello por parte del Estado hacia el Patrimonio Cultural de nuestro espacio de Memoria?.

Desde el año pasado, los integrantes de este colectivo de vecinos, nos pusimos a disposición y sostuvimos reuniones con Pablo Ortiz, Secretario de Servicios Públicos, celebrando la renovación y puesta en valor de la Plaza Mitre para el disfrute de los vecinos, pero solicitando asimismo la preservación de los murales plasmados en las gradas del “Anfiteatro de la Memoria”. Éste fue el acuerdo verbal y de absoluta buena fe al que arribamos en la última reunión sobre el final del 2020.

Hoy nos despertamos tristemente ante el panorama de una plaza “en blanco”, sin colores ni memoria, sin esos murales que eran mojones que daban cuenta de un proceso social de construcción de memorias locales a través de los años, y por ello eran únicos e irreproducibles, imposibles de replicar con copias porque las mismas carecerían de toda la carga emotiva puesta a lo largo de dicho proceso, y por ende carentes de sentido alguno. 

Es evidente que para estos funcionarios, que no respetaron la palabra empeñada, la puesta en valor de un espacio público implica borrar su historia, el recuerdo de cada asamblea, de cada acto, de cada 24 de marzo reunidos en la plaza. Poner en valor, según su mirada, significa borrar el recuerdo de los 30.000 desaparecidos, de los árboles que plantamos y por los que desde hace 45 años nos faltan en Alta Gracia. Significa borrar la huella de cada secuestro, pero también de cada acto de memoria y resistencia de nuestros valientes sobrevivientes que se animaron a narrar el horror, la resistencia de nuestras Abuelas, Madres y Padres de la Plaza, de Emi y Santiago. Significa borrar, con un triste y premeditado acto, el trabajo enorme y a pulmón de muchos vecinos empeñados en mantener viva nuestra memoria, único reaseguro para no repetir el pasado y consolidar la consigna NUNCA MÁS al terrorismo de estado en Argentina.

Te puede interesar
Ranking

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email