Este viernes 13 de noviembre, Norma Noriega entró a un cajero automático del Banco de La Pampa y se encontró con una gran sorpresa: encontró dos cheques tirados en el piso, por un valor de 450.000 pesos, al portador.

Sin dudarlo, Noriega tuvo un gran gesto. Buscó en internet al firmante, lo encontró y le devolvió los documentos.

“Fui a sacar dinero porque tenía que comprar remedios para mi hija y encontré los cheques en el piso. Localizamos a la persona por internet y se los pudimos devolver porque era suya la plata“, explicó Noriega a Radio Don.

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"Lo podía cobrar cualquiera, pero ese dinero no era mío. Busqué el dueño y se lo devolví. Si no lo encontraba, lo iba a entregar en la comisaria de Eduardo Castex. Cuando lo localizamos, lo esperamos un rato y los vino a buscar"; señaló.

El dueño de los cheques perdidos, un importante comerciante pampeano,  le retribuyó el gesto con un vino. Pero lo curioso es que, según trascendió, el vino estaba "picado". 

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Cuando la mujer fue consultada por lo del vino vencido ella contestó:

"Eso no me interesa porque hice lo que tenía que hacer. Tengo la conciencia muy tranquila... Hice lo que correspondía y nada más"; finalizó la vecina pampeana.