Si bien ya era un anuncio desde hacía algunos meses, el pasado martes 25, el Gobierno nacional oficializó la fecha del Censo de Población y Viviendas, que será el próximo miércoles 18 de mayo. En Alta Gracia, las expectativas acerca de los números que arroje la medición son altas, principalmente entre la clase política. La partida de ajedrez de cara a las elecciones 2023 ya ha comenzado y es un dato crucial conocer cuántos concejales se elegirán para poder armar las estrategias.

La Carta Orgánica Municipal establece que la cantidad de legisladores locales se incrementa en dos por cada 10.000 habitantes. El último censo arrancó expresiones de frustración entre quienes esperaban que la ciudad alcanzara los 50.000 pobladores y el Concejo Deliberante contara con 11 ediles. Los 48.140 habitantes contabilizados en 2010 no fueron suficientes, pero sí dan la seguridad de que 12 años después, habrá al menos dos concejales más en el recinto de Belgrano 15.

No es necesario un censo para darse cuenta que en los últimos 12 años Alta Gracia ha crecido mucho. Si se realiza un ejercicio de memoria, se visualizará un edificio de varios pisos nuevo y una gran cantidad de nuevas construcciones en loteos ubicados en todos los puntos cardinales: Lo Tengo pasando barrio Parque San Juan; Crucero Sud y barrio La Perla cuentan con muchas nuevas viviendas; 8 de Agosto; Liniers de Horizonte; Portales del Sol; Villa Juana; Villa Camiares; Tres Gracias; Reserva Tajamar; Villa Juana y otros que todavía están en las primeras etapas de construcción. Las dudas son acerca de cuántas de esas viviendas son habitadas por personas que ya vivían en la ciudad y cuántas por nuevos pobladores. 

La posibilidad de que los concejales de Alta Gracia se incrementen en dos o cuatro implica mayor holgura a la hora de conformar las listas. Si la elección se polariza como sucedió en 2019, el partido o alianza ganador se llevaría seis concejales y el segundo obtendría cinco en un caso o los números serían siete y seis si la ciudad tuviera 60.000 habitantes o más. Si los resultados son más distribuidos, una tercera fuerza podría soñar con ingresar al Concejo o tal vez con alcanzar la inédita cifra de dos ediles.

El edificio

La falta de espacio para el Concejo Deliberante fue una problemática que quedó al desnudo en 2020 y 2021, cuando no hubo espacio en el que realizar las sesiones respetando los protocolos sanitarios por el coronavirus covid-19. Al finalizar las sesiones ordinarias, se anunció que se ampliaría el recinto. La necesidad de mayor espacio físico es una realidad con nueve concejales. Cuando haya 11 -lo que ya es un hecho que sucederá a partir de 2023-, el problema se incrementará y con 13 será aún mayor. Otra situación similar sucederá con los despachos destinados a cada uno de los bloques que obtienen representación: actualmente, solo hay dos oficinas para ese fin, que están ocupados por Hacemos por Córdoba y Alta Gracia Crece. Si se incorporara una tercera fuerza, también habría que rediseñar el espacio destinado para las actividades del bloque.

La oportunidad de emprender una reforma edilicia puede convertirse también en una posibilidad de realizar una obra que no sea para el "mientras tanto", sino que constituya una remodelación del Concejo Deliberante con perspectiva a los próximos diez años, por lo menos. Hasta el 18 de mayo, todo son expectativas. Una vez concluido el Censo, habrá números con los que abordar la realidad.