El martes 23, comenzaron a llegar las delegaciones. Algunos artistas callejeros incluso empezaron a plasmar sus obras mucho antes, queriendo formar parte de este primer Encuentro de Muralistas que comenzó el jueves 25 y se extenderá hasta el domingo 28, y que busca intervenir con arte callejero las paredes de barrio Sur. Diferentes delegaciones de Argentina y de países latinoamericanos se convertirán en altagracienses por unos días, mezclándose con los vecinos y distribuyendo pinceladas por más de 70 murales, para embellecer una de las zonas mas importantes de la ciudad. El encuentro busca revalorizar las paredes de Alta Gracia, teniendo como premisa principal que el arte transforma y embellece.

Ezequiel Robledo llegó desde México el pasado jueves 25 para participar del Encuentro, del que se enteró por medio de las redes sociales. "Descubrí la convocatoria por medio de Facebook tengo muchos amigos en común que fueron formando parte de diversos encuentros por todo el país, y de ahí me enteré. Mandé un par de fotos sobre lo que hago y una breve reseña de mi actividad y luego desde la organización me confirmaron para que participe”, explicó el artista mexicano. Sobre sus expectativas para el encuentro, Ezequiel expresó que "siempre son altas” y agregó que esta clase de eventos tienen una gran importancia para él como artista ya que, además de ser una increíble oportunidad de poder dejar algo de su trabajo en otra ciudad, "es una oportunidad de conocer gente nueva, ver a amigos que viven en otras provincias, y poder viajar, que es el tema principal de mi obra en estos últimos tiempos. El viaje como experiencia, como intercambio con otros artistas, para poder abrir la mente, para poder encontrarnos con nosotros mismos y con otros, para compartir un mismo lugar y tiempo haciendo lo que más nos gusta, pintar”.

¿Qué lugar tienen este tipo de intervenciones en tu país? 

Cada vez se están viendo más eventos de este tipo, lo que me pone muy contento, porque el llamado "arte urbano” cada vez es más aceptado en las diferentes sociedades, y se están viendo muchas más intervenciones artísticas no solo en mi país, sino que es una movida mundial, y eso me pone muy contento, como artista, y como persona, porque el arte salió a la calle y está conviviendo con la gente cada vez más.

¿Cómo crees que este tipo de intervenciones influyen en la comunidad? 

Positivamente, sin dudas, porque las intervenciones llenan de color los barrios, y le dan otra impronta, otra importancia al día a día, en el efecto en la gente. Eso se nota cuando haces un paralelismo entre ciudades o lugares que no están intervenidos y en otros donde sí. Esto repercute en el común de la gente que quizás no está acostumbrada a ver o a detenerse en este tipo de arte, y se está naturalizando de tal forma, que actúa como nexo entre la realidad de la rutina diaria de cada uno y el entorno, en donde hay mensajes, se cuentan historias en los muros, o simplemente el color y las formas, transforman la experiencia de transitar por la ciudad en un viaje más amigable si se quiere, o por lo menos, mejor que una pared gris o con pintadas políticas o publicidades, que poco tienen para ofrecer a la vista cuando uno recorre cualquier ciudad.