Lo que cuenta es la intención, dice el refrán. Sin embargo, más allá de las buenas intenciones, algunas cuestiones necesitan una resolución práctica. Especialmente en medio de una pandemia y en un contexto de aislamiento.

El pasado 10 de abril, cuando el COE central determinó el aislamiento de Villa Parque Santa Ana, Villa del Prado y Alta Gracia, la principal demanda fue la de cajero automático en comunas que no cuentan con aparatos de extracción de dinero. Gran parte de los intendentes y jefes comunales de localidades de la Autovía Atilio López y la ruta 5 requirieron al gobierno provincial un cajero móvil de Bancor. Luego de un fin de semana, el aparato comenzó una penosa recorrida.

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Por cercanía geográfica con la capital provincial, el primer lugar al que arribó el cajero fue Villa Parque Santa Ana. Casi como un chiste de mal gusto para quienes estaban “encerrados” en la localidad sin dinero esperando poder realizar una extracción para comprar artículos esenciales, el móvil llegó sin dinero en efectivo. La municipalidad de Santa Ana anunció el lunes 13 de abril que el cajero estaba instalado y se podían realizar transferencias y consultas, que a la brevedad se le cargaría la plata para poder habilitar las extracciones.

El cajero permaneció tres días en Santa Ana y los vecinos realizaron numerosos reclamos por múltiples fallas en el aparato. Eso implicó que el móvil se demorara en su arribo a Villa del Prado, ya que el jefe comunal solicitó que se reemplazara. Luego de dos días en la comuna, el aparato siguió su recorrida.

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El pasado miércoles, fue el turno de la localidad de Anisacate de contar con cajero móvil. Solo duró unas horas, hasta que una vecina de Valle de Alta Gracia decidió utilizarlo e informó que nuevamente presentaba fallas en su funcionamiento.

En un contexto de aislamiento social, cuando se les solicita a los vecinos permanecer en sus hogares y con las dificultades de circulación desde las localidades aledañas a Alta Gracia por el paro de transporte, la necesidad de extraer efectivo es imperiosa para muchas familias. Y la instalación de un cajero automático que recorra las distintas comunas y municipios debería ser una solución práctica y no el motivo de traslado de personas sin sentido alguno por fallas en el aparato.