Luego del pedido de captura internacional por las denuncias de violencia de género en su contra, el golfista Ángel "Pato" Cabrera fue detenido en Río de Janeiro.  

Este lunes, el abogado Carlos Nayi, representante de una de las denunciantes, Cecilia Torres Mana, afirmó que "se espera que en los próximos 10 a 15 días", Cabrera ya esté en Córdoba, concretándose el pedido de extradición.

En diálogo con el programa "Es por acá" por radio Universidad, el letrado sostuvo que se aguarda que los organismos intervinientes "hagan lugar al pedido de extradición para que se concrete en los próximos días, de no mediar ninguna complicación".

Agregó que "hay un tratado de reciprocidad con Brasil, y si bien no hay un plazo concreto, teniendo en cuenta que se contempla la cantidad de hechos, la gravedad de los delitos atribuidos" hacen posible que el traslado sea inminente.

Nayi dijo que cuando la extradición se concrete, Cabrera "llegará a la Argentina, custodiado por personal policial y de Policía Aeroportuaria, con la condición de detenido a orden y disposición de la Cámara Segunda del Crimen de la ciudad de Córdoba".

"Una vez alojado en la unidad carcelaria de Bouwer, deberá enfrentar dos procesos con varias imputaciones, desobediencia a la autoridad reiterada, hurto simple, lesiones leves y lesiones leves calificadas", entre otras, remarcó el abogado de la denunciante.

Además de las acusaciones que deberá enfrentar en juicio, el golfista tendrá que responder "por cuatro hechos de desobediencia a la autoridad reiterada", ya que violó órdenes de restricción en perjuicio de Cecilia Torres Mana y también a otras acusaciones de amenazas, graficó el portal Cba24n.

En ese sentido, Nayi relató que "estando prófugo de la Justicia, amenazó a la madre de sus hijos" tras conocer que iniciaba una nueva relación, diciéndole: "Me voy a tomar un jet, te mato y me cago en los jueces".

En otro párrafo el letrado aseveró que "si es condenado, (Cabrera) deberá cumplir pena efectiva".

Cabe recordar, que el golfista salió del país desoyendo órdenes judiciales que se lo impedían, para jugar un torneo en los Estados Unidos. Desde allí, se dirigió a Brasil  pasando por alto las comunicaciones de Interpol con código rojo, que pesaban en su contra ya que estaba prófugo de la Justicia argentina.

Fuente: La Nueva Mañana