(Sumario Noticias, Alta Gracia) Las reminiscencias del fuego permanecen aún en el paisaje del Valle de Paravachasca. El miedo, a un nuevo episodio, es un fantasma que sobrevuela por todas las localidades sin excepción, en una época complicada en donde todas las directivas apuntan a no iniciar focos adrede. La provincia de Córdoba vive días de alto riesgo, ya que las condiciones ambientales se combinan de manera preocupante, especialmente en las sierras. El calor, el viento, y la falta de lluvia son factores que, combinados, conformar un combo explosivo para el medio ambiente.

El secretario de Gestión de Riesgo Climático, Claudio Vignetta, adelantaba la semana pasada que esta semana será “complicada para el riesgo de incendios forestales”, ya que se prevén temperaturas por sobre los 30 grados en zonas de montaña, viento persistente del norte que superaría los 40 kilómetros por hora y humedad ambiente casi nula.

Vignetta reiteraba en aquella oportunidad que en la provincia está “prohibido hacer fuego, no se debe iniciar ningún tipo de fuego, cualquier fuego puede comenzar un incendio”. Por otro lado, solicitó a los ciudadanos “estar atentos ante la aparición de una columna de humo”, y avisar prontamente a la Policía o a los bomberos.

Sin embargo, los episodios se siguen sucediendo, y mucho se habla de la desidia de los gobiernos locales por la falta de controles y medidas para poder evitar los desastres naturales. Al mismo tiempo, nunca falta un “perejil” que inicia los focos de manera intencional o que “no se da cuanta” de apagarlo.

En este contexto de máximo riesgo de incendio en la provincia de Córdoba, en la localidad de Villa Los Aromos se vivieron dos episodios, en menos de una semana, de incendios en el depósito de ramas de la localidad. El primero tuvo lugar en la noche del pasado jueves 26 de agosto, y pudo ser apagado por vecinos y brigadistas de la zona. El último ocurrió anoche, en el mismo lugar, ubicado en la estancia “El Saldañil”. Esta vez fue controlado finalmente por los bomberos voluntarios.

“La comuna es responsable por la desidia y la falta de políticas claras frente a este estado de situación que pone en riesgo no sólo la vida de quienes habitan este territorio sino también a los bienes comunes de todo nuestro valle”, afirmó Laura Obolevich, de la Asamblea Paravachasca en el programa radial Juntos a la Par, de Siempre Radio 93.3.

La misma Asamblea, ya había denunciado en mayo de este año, una quema programada de poda en una zona roja de conservación de Bosque Nativo en Villa Los Aromos. “Tal como lo visibilizamos y denunciamos desde la Asamblea Paravachasca, la quema (des)controlada y programada de poda en el depósito comunal se llevó a cabo en sectores de Alto Valor de Conservación de Bosque Nativo (Categoría I – OTBN CBA)”, aseguró la organización desde sus redes sociales. “Las acciones y políticas públicas de los gobiernos locales y provincial deberían estar orientadas a la conservación y restauración de las zonas incendiadas y no a la pérdida sistemática de la biodiversidad en Paravachasca”. 

En aquella oportunidad, vecinos de la comuna denunciaron la persistencia del humo y el olor a quemado 20 días después del episodio.

Lo cierto, es que la Comuna viene depositando sistemáticamente restos de poda y de ramas recolectadas en el ejido en aquel lugar y la Asamblea ya había anticipado que se trataba de una zona de mucha peligrosidad y que había que buscar alguna solución. “Se lo manifestamos a la Comuna, ofreciendo también alternativas para darle uso a esos restos, pero las propuestas no tuvieron eco en las autoridades”, manifestaba Diego Aranda en aquella oportunidad.

Durante el año pasado, en la provincia de Córdoba ardieron más de 300 mil hectáreas, 30 mil de las cuales perteneces al Bosque Nativo del Valle de Paravachasca. Gran parte de estas hectáreas, corresponden al sector entre Villa Los Aromos donde no se llevó a cabo ningún plan de restauración ambiental.