Irene Cuevas, la pandemia y la lucha por sus derechos

(Sumario Noticias, Alta Gracia) La historia de lucha de Irene Cuevas, una adolescente de 18 años que tiene una discapacidad motriz  puso en cuestión muchos aspectos del sistema educativo y de la salud.

Irene, nació con 400 gramos. En ese momento, en medio de los peores pronósticos, comenzó la pelea por sus derechos. 

Las luchas, estuvieron desde el inicio conducidas por la tenacidad de sus padres, Alicia Maureli y Juan Carlos Cuevas. A medida que fue creciendo, ella misma también fue partícipe. La joven milita en la organización META, que lucha por los derechos de las personas con discapacidad y visibiliza su problemática.

Tras cumplir 18 años, Irene abrió una cuenta de Facebook y comenzó a hacer publicaciones visibilizando ciertas situaciones y reclamos: 

 

 

 

Según explicó Maurelli, Irene brega por algo que debería ser tan natural como la plenitud de sus derechos. Y en cada reclamo que ella visibiliza, siempre hace hincapié en que no  solo lucha por ella misma, sino por todos aquellos que pasan por situaciones similares.

Cuando Sumario Noticias le consultó a Alicia Maureli, su madre, cómo atraviesan la situación de la pandemia, ella no tardó en contestar que "Este tiempo, Irene la pasó muy mal, fue muy difícil y lo sigue siendo".

Además, describió la situación en detalle: "Durante la pandemia tuvo cuadros de crisis, de excitación y afectación motriz muy fuertes. No podía tener maestros presenciales que a ella la ayudan mucho. Todo lo emocional a ella le desencadena movimientos motrices mucho más contundentes. Y no los puede manejar. Ella no tiene cerebelo que es quién regula estas capacidades".

En el año 2016 la familia consiguió una medida cautelar, dictada por la  Comisión Interamericana de Derechos Humanos, desde la Organización de los Estados Americanos que ordenaba al Estado a cubrir la integridad de sus requerimientos. Sin embargo, según explicó Alicia, "Durante los cuatro años de Mauricio Macri, no le dieron pelota a esta Ley y me hacían ir a negociar pero sin respuestas. Un funcionario de la Secretaría de Derechos Humanos de Macri me dijo que yo me tenía que ajustar a la oferta y la demanda de la discapacidad, imaginate". 

Sin embargo, con el actual gobierno encabezado por Alberto Fernández, el pasado 24 de julio comenzaron nuevas negociaciones. 

"Si bien este actual Gobierno no ha puesto recursos para el tratamiento de Irene, al menos sí está mediando y presionando al Apross para cubrir sus necesidades. Y en esas negociaciones la prestadora reconoció ciertas cosas, como por ejemplo la actualización de los  honorarios de este año"; explicó.

"Irene requiere muchísimos insumos. Esto genera muchos gastos y estos insumos van aumentando", manifestó preocupada.

"Además, está muy dolorida y enojada porque tiene una silla de  ruedas que ya tiene siete años, la cual le lastima la cintura y las axilas debido a que ya le quedó muy chica"; detalló Maureli. Y añadió que la prestadora de salud Apross, al negarle prestaciones que resultan vitales para Irene, "se complica sumamnete su situación y estado de salud".

También, comentó se le rompió la notebook adaptada y no consiguieron a través del Apross una nueva. Por eso, Irene estuvo meses sin poder hacer tareas y muy angustiada. Por otra parte, al ser paciente de mucho riesgo, prácticamente no sale. Y si lo hace, circula con todos los recaudos, lo que resulta muy tortuoso.

Sin embargo las dos continúan luchando, peleando por asistencias y una situación más favorable. Aunque, de ratos, parecería que el simple cumplimiento de sus derechos fuese tan solo un sueño.