Mariana Garay sobre la difusión de datos de pacientes contagiados: "Es un horror lo que hacen en las redes sociales, compartir nombre, fotos y escrachar"

(Sumario Noticias, Alta Gracia) A raíz de la difusión de los datos del último paciente positivo de coronavirus en Alta Gracia, a través de algunos medios y de diferentes redes sociales, sumado a los reiterados pedidos y solicitudes de información de personas con diagnostico de COVID-19 confirmado, Mariana Garay, directora del Hospital y actual coordinadora del Coe Regional Nº 8, recordó las razones por las cuales los nombres y datos personales de pacientes deben protegerse.

"Es un horror lo que hacen en las redes sociales, compartir nombre, fotos, escrachar. Es una vergüenza el comportamiento y la hipocresía de parte de nuestra sociedad y la falta de empatía con el paciente y su familia que está pasando por una situación tan compleja, es imposible de comprender"; señaló, Garay después de que se difundiera el nombre y datos del último paciente contagiado de Covid-19.

Ante la insistencia, sobre todo en redes sociales, de conocer los nombres y lugar de trabajo de los pacientes internados en distintas localidades de la provincia, desde los centros de sanidad remarcaron que "difundir este tipo de datos está prohibido por ley y su divulgación podría afectar a la persona contagiada, a su familia e incluso a su círculo más cercano".

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"Por eso no damos los datos de los pacientes", añade la Directora.

En este sentido,  la Ley 26.529 del Derecho del Paciente, vigente desde febrero de 2010, regula las relaciones civiles entre el paciente con los médicos y con las instituciones de la Salud y legisla sobre la información que el médico debe dar y que el paciente tiene que recibir respecto de la documentación clínica.

La información y documentación clínica del paciente debe contar con el debido resguardo de la intimidad del mismo y la confidencialidad de sus datos sensibles.

Por su parte, la Ley 25.326 de Protección de Datos Personales establece el resguardo integral de datos asentados en archivos o registros -sean éstos públicos o privados- para garantizar el derecho al honor y a la intimidad de las personas.

Además, el secreto estadístico, en relación a la elaboración de base de datos en el sistema de salud, establece que las declaraciones y/o informaciones individuales no podrán ser comunicadas a terceros ni utilizadas, difundidas o publicadas en forma tal que permitan identificar a la persona o entidades.