Córdoba: la Iglesia cuestionó el apuro por los cambios en el Código de Convivencia

Organismos de la Iglesia advirtieron sobre el tratamiento urgente de reformas al Código de Convivencia y reclamaron un debate amplio sobre el rol de limpiavidrios y cuidacoches.

Sociedad29 de diciembre de 2025SNSN
Limpia vidrios - Naranjitas

(Córdoba; SN) La Pastoral Social, la Vicaría de los Pobres y la Arquidiócesis de Córdoba difundieron un comunicado titulado “Por un Código de Convivencia donde haya lugar para TODOS”, en el que expresan preocupación por el tratamiento legislativo de las modificaciones al Código de Convivencia de la provincia.

Las entidades señalaron que la discusión requiere “diálogo y participación de todos los sectores involucrados” para evitar decisiones apresuradas. El documento cuestiona que el debate se impulse en pleno cierre del año, “cuando muchas personas están cerrando etapas, con el peso de todo lo transcurrido en un año difícil”.

El texto advierte que el apuro “no se corresponde con la gravedad de la problemática” y reclama generar “espacios reales de escucha” antes de legislar. En ese marco, remarca que el análisis debe contemplar la situación de limpiavidrios y cuidacoches, así como la figura del “merodeo”, definida como una de las zonas más controvertidas de la normativa vigente.

Los organismos religiosos reconocen que alrededor de estas actividades existen “excesos, extorsiones, delitos y terceros que se benefician”, pero también aclaran que para muchas personas representan su única forma de subsistencia. En ese sentido, destacan que numerosos trabajadores “realizan su labor con responsabilidad y buen trato”.

El comunicado plantea una serie de interrogantes sobre las alternativas que el Estado podría ofrecer: oportunidades para quienes dependen de estas tareas, abordajes integrales para las adicciones y la falta de vivienda, y caminos de inserción laboral para personas con causas penales. Asimismo, cuestiona prácticas como las detenciones por “portación de rostro” y la criminalización de quienes se movilizan en moto para trabajar.

El texto también se pregunta si las sanciones previstas —multas, días de arresto o trabajos comunitarios— lograrán resolver los conflictos asociados o si solo funcionarán como un intento de ocultar la problemática.

Para finalizar, el documento recuerda una experiencia relatada por el arzobispo Ángel Rossi en la presentación del libro “Nadie se salva solo”. Allí se menciona la visita del fallecido Papa Juan Pablo II a Santo Domingo, donde observó el llamado “muro de la vergüenza”, construido para ocultar a los sectores más pobres. Según el comunicado, ese testimonio interpela sobre la necesidad de “generar trabajo registrado, promover la inclusión y brindar oportunidades reales”.

El mensaje concluye que, ante problemáticas complejas, “no existen soluciones mágicas”, y que el camino debe construirse mediante un proceso colectivo cuyo eje central sea el diálogo.

Te puede interesar
Lo más visto

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email